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vioches llega cargado de colores hoy. Quiero enseñaros varios diseños con pompones de colores. El primero, consiste en una pulsera dorada con pompones beige, turquesas y morados (en varias tonalidades de estos dos últimos), dando un toque degradado muy interesante.  Pulsera dorada con pompones en color beige, morado y turquesa. Los eslabones de la pulsera se unen como si fueran hojas, con una forma muy original que realza la muñeca.  Detalle de la cadena dorara y los pompones turquesa y morado. Hablando de pulseras, también hice otro modelo con cordón de colores, en este caso escogí el naranja y el azul cielo para esta temporada primavera-verano. Se cierran con nudo corredizo y varios nudos fijos sujetan unas piezas de nácar.  Pulsera de cordón turquesa y naranja con pompón beige y nácar. Si os fijáis, las piezas de nácar forman las figuras de una flor y una luna. La anilla que los sujeta a la pulsera es de plata de primera ley. En esta ocasión, el color de los pompones elegidos es beige, porque quería que resaltase el color de los cordones, sin quitar protagonismo a las piezas de nácar.  Detalle de las piezas de nácar y plata. Por último en estas piezas hechas con pompones, no podían faltar un par de pendientes. El cierre es de presión, compuesto de dos cristales de Swarovski aunque en esta ocasión, con un acabado mate.  Pendientes con pompón morado y cristales. Del pendiente cuelga un pompón en color lila, siguiendo con la gama cromática de la primera pulsera. Estos pendientes aportan un aire desenfadado, dando mucha soltura y movimiento a tu melena al viento ;)  Detalle del pompón que cuelga de los pendientes. Espero que os hayan gustado estos vioches y que os animéis a poner color en vuestros complementos porque, se acerca el calor y, con él, las ganas de lucirte.
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Como avanzamos a principio de mes, el dorado iba a reaparecer en vioches. Qué mejor que con una nueva colección basada en una combinación de elementos: libélula, cristal, perlas y de fondo el color dorado. La pulsera está hecha con una cadena finita dorada y una libélula en su parte central. El toque especial lo podéis ver en la fotografía de la derecha, la cadena cuelga dos centímetros por debajo del cierre, para acabar con un cristal. Esta pieza colgante da mucha movilidad a la pulsera. Al ser fina, no molesta y la puedes llevar en tu día a día cómodamente.
La colección tiene dos modelos diferentes de pendientes. Como acabamos de ver, la pulsera tiene dos elementos diferenciales, que son la libélula dorada y el cristal de Swarovski. Por este motivo, he creado dos modelos de pendientes: uno con la libélula como elemento principal y otro cuyo toque distintivo es cristal. Los pendientes de libélula tienen un gancho con una forma sencilla lo que aporta delicadeza. Debajo de la libélula, cuelga una perla cultivada. Sin embargo, como todas las joyas en vioches, esto es personalizable. Es decir, puede colgar una perla, un cristal, una piedra del color que más te guste... ¡Es la ventaja de lo hecho a mano y artesanalmente! 
Pendientes de libélula dorada y perlas cultivadas.
Los pendientes de cristal de Swarovski tienen cierre a presión con forma de bolita dorada. De ellos cuelga un abalorio de este mismo color en forma de lágrima. Mis seguidores de hace meses os daréis cuenta de que este abalorio tiene la misma forma que los pendientes de la exitosa Colección Rose. (Si no los recordáis, podéis volver a verlos haciendo clic encima del nombre Colección Rose) 
Pendientes en forma de lágrima dorada con cristal de Swarovski.
Espero que os haya gustado esta vuelta del dorado, puesto que tengo en mente más modelos en dorado que os iré enseñando poco a poco.
Desde hace un tiempo, tenía ganas de crear algo relacionado con los mosaicos, tan característicos del suelo de Lisboa. En septiembre de 2012, la oficina de Turismo de Lisboa lanzó una campaña para promocionar la ciudad, que consistía en un código QR en forma de mosaico en la calzada del barrio histórico de Chiado. A través de este código se accedía a información turística sobre rutas urbanas, lugares de interés, gastronomía, ocio… Lo más curioso es que trasladaron los adoquines lisboetas a otras ciudades como Barcelona para promover la iniciativa más allá de sus fronteras. Os dejo el vídeo para que lo podáis ver y después os sigo explicando. Hace pocos días vi unos abalorios de cerámica en forma cuadrada y recordé los mosaicos y esta campaña en concreto. Como homenaje a Lisboa, decidí crear la colección “Mosaico”.
Os adelantaba novedades y en marzo lanzamos una nueva colección de pendientes. Se llama Rose puesto que la rosa es el elemento principal y el nombre está escrito en francés. Quizás os preguntéis ¿por qué en francés? Pues bien, Toulouse es la ciudad del sur de Francia conocida como "La Ville Rose". Aunque el nombre no haga referencia a la rosa como flor, sino como color, me ha parecido curioso y he decidido llamar a esta colección Rose.
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